Wow, no me había parado nunca a pensar en este momento y sin embargo aquí estoy, delante de la pantalla escribiendo uno de los artículos de este blog que más me va a costar escribir. Llevo semanas tratando de hacerlo y mi momento vital es tan exigente que no me permite ni dedicarle 10 minutos al día. Esa es una de las principales razones que me llevan, precisamente, a reflexionar sobre el futuro de este blog y a plantearme la necesidad de ponerle un punto, no se si final, a parte o seguido, pero un punto.
Por lo que sí, ha llegado el momento de decirle adiós o quizás hasta luego (aún no lo se) a El Invernadero Creativo. Este blog surgió un 15 de agosto de 2013 en un momento vital complicado y me ayudó a salir adelante. Desde entonces me ha acompañado en mi vida durante más de 10 años. De blog pasó a proyecto artístico, de proyecto pasó a experiencia vital. Su evolución ha sido también la mía, ha pasado por tantas etapas como inquietudes he tenido. Gracias a este proyecto he participado en multitud de ferias creativas, formé un laboratorio de estampación y he enseñado a muuuuchas personas técnicas con las que dar rienda suelta a su creatividad. He explorado el mundo del DIY, hecho tutoriales, empecé a hacer vídeos en directo antes de que se pusiera de moda, compartí mi pasión por los mandalas, por la serigrafía, por el arte en general. A través de El Invernadero Creativo he compartido mi pasión por la historia del arte y, en estos últimos años, por el bricolaje.
Ha cambiado mucho, muchísimo, tanto como yo lo he hecho. Y ahora, le toca cambiar un poco más. En este momento no puedo dedicarle tiempo que este proyecto se merece, otras prioridades se han puesto por delante y la lista de emails sin atender no me parece la forma más responsable ni lo que se merece este bonito lugar. Por eso es el momento de decir públicamente lo que lleva meses ocurriendo en mi interior. Adiós mi pequeño gran invernadero, a veces te echo de menos, pero la vida te lleva por caminos inesperados y saber decir adiós en el momento adecuado es un ejercicio de madurez. Así que con una sonrisa en la boca por todo lo que hemos vivido juntos y una lágrima en los ojos por lo que te echo de menos, me despido de ti, y de vosotros, creativos y creativas, que me habéis acompañado en este inmenso viaje a través de los bits.
Por el momento, mantendré activo este blog y todo su contenido durante algún tiempo para todo el que le puede resultar aún útil. Estará activo unos años quizás, y en el futuro decidiré qué hacer con él. Ahora solo es, por tanto, un hasta luego, hasta algún momento en el que volveremos a encontrarnos con este u otro nombre.
Un abrazo a todos y todas, sed felices, nos vemos en las redes.
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