La silla Eames, también conocida como silla Tower, se ha convertido en los últimos años en un objeto de deseo entre los profesionales y aficionados a la decoración. Cualquier fotografía que muestre una estancia de la casa bonita tiene entre sus integrantes una o varias sillas de este modelo. Las Eames son sillas de comedor modernas que se han identificado con el estilo nórdico, aunque también combinan con el industrial, el mínimal… y aunque puedan parecer una creación reciente, su historia nos transporta varias décadas atrás. Hoy me adentro en uno de esos post que me fascinan para descubrir la historia detrás de las piezas de mobiliario icónicas, hoy vamos a descubrir la curiosa historia de las sillas Eames.
Índice
El origen
La historia de esta icónica silla comienza en la América de 1947. El gobierno de los EE.UU. se había propuesto ofrecer una vivienda digna y económica a sus ciudadanos y Nelson A. Rockefeller, director por aquel entonces del MOMA de Nueva York, se adentró en incentivar la creación de mobiliario low cost con los que los ciudadanos pudieran amueblar esas casas. Para ello convocó el «International Competition for Low-Cost Furniture Design«, un concurso que buscaba aquellas piezas de mobiliario económico y funcional que se pudiera fabricar en masa.
Por aquel entonces, los diseñadores Charles & Ray Eames, con más de 20 años de experiencia por aquel entonces, prepararon un diseño para participar en el concurso. Se trataba de la silla Eames. Se presentaron más de 3000 piezas de las que, finalmente, en 1949 se otorgaron los premios. La silla Eames quedó segunda en la categoría de asientos.
(Se la llama silla Tower porque los diseñadores se inspiraron en la Torre Eifel para crear este diseño)
Una silla ganadora
Lo que hizo destacar a esta silla fue su diseño innovador, con una estética que podía encajar en cualquier ambiente, tanto doméstico como de oficina. Además estaba fabricada con materiales revolucionarios que podían reproducirse en grandes cantidades.
Eames estaba fabricada con un asiento de fibra de vidrio y plástico, que aportaban ligereza, flexibilidad, higiene y adaptabilidad y unas patas de madera, que le daban personalidad y robustez. (La silla Eames es la primera silla de la historia fabricada con plástico). Unos años más tarde se comprobó el gran perjuicio de la fibra de vidrio para el medio ambiente por lo que se paró la producción. En 2004 se retomó de nuevo pero, esta vez, con polipropileno 100% reciclable.
Más de un modelo
Si algo caracteriza a esta silla es el gran número de modelos distintos que se pueden encontrar. Los diseñadores comenzaron a producir variaciones de la silla para adaptarlas a todos los gustos de todos los consumidores. Como línea común encontramos un asiento de polipropileno tintado, con colores vivos, recubierto, o no, con patas que pueden ser de metal o de madera. En esta imagen se pueden ver algunos modelos de esta silla.
La silla Eames hoy
De objeto de diseño a silla para el mercado común. De olvidada a objeto de deseo. Esta es la historia de una silla que se ha convertido en un icono de la decoración de interiores. Una silla de la que a día de hoy se realizan multitud de réplicas. Una silla que se adapta a cualquier estancia de la casa, incluso en el ámbito infantil.
¿Conocíais la historia de la silla Eames o Tower? Espero que os hay parecido interesante. Si queréis que escriba más post sobre historia de la decoración dejádmelo en los comentarios. Un abrazo para todos y todas, sed felices, nos vemos en las redes.
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