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Cómo colocar y cambiar las persianas de casa

Hoy sacamos la caja de herramientas para llevar a cabo una reparación muy sencilla que puedes hacer tú mismo en casa. Se trata del cambio de las persianas enrollables. Un elemento que aunque utilizamos a diario y que tiene una vida útil bastante larga, con el tiempo suelen dar algún problemilla. Bien por rotura de una de las piezas, porque la correa está desgastada o porque se ha desmontado el mecanismo, nos toca ponernos manos a la obra.

Las reparaciones de las persianas enrollables no son demasiado complicadas. Cuando llega el momento de hacer el cambio, podemos acudir a un profesional o corremos a buscar un tutorial que nos explique como hacerlo nosotros mismos.

En este artículo te explico con todo lujo de detalles cómo cambiar las persianas de casa tú mismo, sin necesidad de pagar a nadie.

Las partes de una persiana

Antes de entrar en materia, es conveniente conocer las piezas que componen una persiana. Esta información es muy útil para conocer qué partes vas a necesitar cambiar, si solamente necesitas el paño de persiana (las láminas) o también necesitas algún accesorio.

  • Lamas o láminas: se llama así al elemento principal que compone la persiana. Es la parte que se enrolla y desenrolla sobre el eje.
  • Soportes: son los elementos que fijan el eje a la pared.
  • Guías laterales o reductoras: se encargan de que las lamas de la persiana suban y bajen por su sitio, sin torcerse ni salirse de su carril.
  • Eje: es el elemento central que sostiene el conjunto de la persiana.
  • Disco y contera: se encuentran a los lados del eje para sostenerlo dentro del cajón. El disco se encarga además de recoger la cinta que hace subir y bajar la persiana.
  • Flejes: son las piezas encargadas de unir el eje con las lamas de la persiana.
  • Cinta: es el elemento que se utiliza para subir y bajar la persiana.
  • Recogedor: como bien indica su nombre, permite recoger la cinta y mantener la persiana en la posición deseada.
  • Topes: van instalados al final de la persiana y se encargan de retenerla para que no se recoja más allá de este punto.

Cómo cambiar las persianas

Llegó el momento de ponernos manos a la obra con el cambio de persiana. Lo primero, aunque parezca muy obvio, es asegurarnos que la persiana que hemos comprado es del tamaño adecuado, midiendo el ancho y la altura de la ventana.

  1. Desmonta la persiana anterior: comienza por retirar los topes. Baja la persiana totalmente y suelta los flejes. Esto nos permitirá retirar totalmente la persiana desde la caja que se encuentra en la parte superior.
  2. Retira la cinta y el eje: suelta la cinta del disco que se encuentra en un lateral del eje y extráela del recogedor. Desatornilla el eje de la contera y sácalo también.
  3. Preparación del hueco de la persiana y los accesorios: revisa todos los accesorios para comprobar que se encuentran en buen estado. En caso contrario, es el momento de cambiarlos. Es normal que se haya acumulado mucha suciedad en el hueco de la persiana. Aprovecha este momento para hacer un poco de limpieza y ponerlo a punto para instalarla la nueva.
  4. Instala la nueva persiana: montamos de nuevo el eje en el disco y la contera, y los fijamos al soporte, asegurándonos de que el eje queda nivelado. Después, desenrolla la persiana sobre el eje e introdúcelo pasándolo por detrás del eje. Engánchalo con los flejes en la última lama. Coloca la cinta en el recogedor y vuelve a engancharlo en el disco, de la misma forma que estaba.
  5. Ajusta la tensión: para que la persiana se mueva correctamente, debes ajustar la tensión. Para ello, desenrolla la persiana completamente (bájala del todo), y gira el eje en sentido horario para tensar la persiana. Comprueba que sube y baja correctamente.

Por si te ha quedado alguna duda, te dejo un video donde explican muy bien cada uno de los pasos que te acabo de explicar.

Seguridad ante todo: algunos consejos de seguridad

Aunque la tarea de cambiar la persiana de casa es bastante sencilla, no puedes olvidar que siempre existen riesgos que se deben evitar. Utilizar unas gafas de seguridad o guantes que nos protejan de posibles cortes son los más habituales. El hueco de la persiana lleva tanto tiempo sin revisar que puede haber alguna punta oxidada con la que pincharse por accidente.

Y como cualquier trabajo en altura, es primordial utilizar una escalera que sea estable y esté colocada correctamente. Evita dejar tiradas las herramientas por el suelo para que cuando bajes no te tropieces.

Como has visto, cambiar las persianas enrollables de casa no es nada complicado. Con una herramienta básica y un poco de tiempo, cualquier persona es capaz de hacerlo en menos de una hora. ¡Es hora de ponerse a trabajar!

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