La habitación juvenil es un espacio muy importante para nuestras vidas. En ella volcamos nuestros intereses, aficiones, alegrías y disgustos. Pasamos muchísimo tiempo, solos o con amigos. Se convierte en parte de nuestra personalidad, en la que reafirmamos como somos y como nos encontramos. Cuando nos hacemos mayores y nos vamos de casa, (a veces) volvemos al cabo de los años y vemos esa habitación con nostalgia.
Desde otro punto de vista, como ma/padres, la habitación juvenil puede tener un puntito de tristeza, porque vemos como nuestros hijos crecen y dejan de ser esos niños inocentes y amorosos con los que hemos compartido los últimos años, para ser un adolescente en pleno desarrollo. Aún así nos toca hacer el cambio de esa preciosa habitación infantil que tanto nos hemos currado a un nuevo espacio totalmente diferente. ¿Cómo afrontar el cambio en la decoración dormitorios juveniles? ¿Cómo decorar una habitación juvenil? Hoy os propongo algunos consejos que os pueden resultar útiles. Allá vamos:
Índice
Decorar una habitación juvenil es cosas de todos
El día que nos enteramos que un nuevo miembro llega a la familia comenzamos a preparar un espacio en casa para él o ella. Una habitación infantil preciosísima con todo lo que a nosotros nos gustaría que tuviera. Las habitaciones infantiles al fin y al cabo son un reflejo de nuestros gustos. Pero con la habitación juvenil el planteamiento es completamente distinto. Ahora esa personita tiene total capacidad de decisión y conoce bien sus gustos y disgustos. A la hora de decorar su futura habitación es muy importante hacerlos partícipes. Tienen que opinar y decidir, al fin y al cabo será su propio espacio en el mundo. El grado de libertad en la toma de decisiones lo tendréis que pactar entre vosotros.
Empezamos por las paredes
Este consejo no es exclusivo para las habitaciones juveniles pero sí es aplicable a ellas. Las paredes son siempre el primer paso a la hora de hacer un cambio en la decoración. Con ellas podemos plantear un espacio completamente distinto al que había.
Recordad que los colores neutros (blanco, grises, pardos) son tendencia pero en una habitación juvenil se pueden hacer concesiones. Para integrar sus colores favoritos de forma elegante podéis crear una pared dominante, por ejemplo con un papel pintado o con un color diferente.
Los textiles son la clave
El nórdico de dinosaurios y la cortina de estrellitas es hora de que pasen a la historia (o a otra habitación). Los nuevos textiles tienen que tener un aspecto más juvenil y lo mejor es que sean ellos los que los escojan. Hay diseños para todos los gustos y son una forma importante de dotar de personalidad al dormitorio. Lo único importante a tener en cuenta es que todos ellos tengan una armonía cromática (escoger una paleta de colores, hemos comentado esto muchas veces en el blog)
Los muebles esenciales
Los muebles de una habitación juvenil son distintos a los de una habitación infantil. Algunos básicos son: un buen escritorio con una silla ergonómica. Estanterías, armario con abundante espacio de almacenaje y la cama con nido (por si algún día viene algún amigo a dormir). A partir de ahí el resto de muebles son opcionales.
Para escoger los mueble se puede optar por visitar una tienda de muebles Madrid y dejarse asesorar. Normalmente tienen conjuntos de dormitorios juveniles que vienen todo a juego e integrado. Otra opción es escoger cada pieza de forma individual o, incluso, reutilizar algún mueble que ya teníais (con algún toque personalizado diferente).
Vía libre a la personalización
Y el resto de la decoración es cosa de ellos. Dejadles que sean los que escojan los complementos, los que los personalicen y pongan poster en las paredes… En definitiva, que hagan suyo el espacio para sentirse cómodos y seguros. Así y solo así cuando sean adultos recordarán su habitación de adolescentes con mucha alegría.
Espero que os hayan resultado interesantes estos consejos. Un abrazo para todos y todas, sed felices, nos vemos en las redes.
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