Quien tiene un jardín tiene un tesoro. Siempre lo hemos sabido pero desde que irrumpió la pandemia del coronavirus y tuvimos que vivir el confinamiento todos hemos sido mucho más consciente de lo valioso que es disponer de un pequeño espacio privado de aire libre. Como bien saben los integrantes del equipo de paisajistas en Sevilla de Sembradas, independientemente del tamaño del jardín se puede trabajar y preparar el espacio para crear en él el lugar de tus sueños. Hay que empezar por una buena idea, planificación y ponerse manos a la obra para crear el jardín que siempre has imaginado. En el post de hoy te ofrezco un poco de inspiración con jardines delanteros y traseros que te dejarán sin palabras. ¿Te atreves a hacerlos realidad?
Índice
Un jardín salvaje
¿Te imaginas tener tu propia selva en el jardín? Un jardín salvaje lleno de vegetación que te abraza e inunda los sentidos. Requiere algo de tiempo llegar a ello pero sin duda merece la pena. Se puede crear un jardín salvaje con especies tropicales pero también con especies autóctonas, dando la sensación de bosque cerrado.
En medio de tanta vegetación un pequeño camino de piedra o losas hará que podamos disfrutar de un agradable paseo entre las verdes hojas de las plantas.
Arbustos con formas
En un jardín de corte más clásico se pueden introducir los arbustos con formas: animales, formas geométricas, figuras humanas etc. Este tipo de esculturas vegetales reciben el nombre de arte topiario y aúnan destrezas de jardinería con otras relacionadas al mundo artístico como la composición o el modelado.
A través de estos arbustos se consigue dar forma a la naturaleza creando un impacto visual que rompe con las formas orgánicas de la vegetación. Las figuras que se pueden realizar no tienen límite pero hay que ir tutelando la planta desde su juventud para que crezca tal y como queremos. Las plantas más utilizadas para realizar estos arbustos con formas son perennes y de tronco leñoso: Boj africano , Ciprés, Leilandi, Mirto, Acebo, Ligustrina, Romero, Tejo común, entre otros.
Islas de flores
Junto al arte topiario las islas de flores son otra de las formas clásicas de dar vida y color a un jardín. Se trata de crear espacios que dibujan formas a través de las flores. Para ello se crea una especie de tapiz floral usando como hilos flores de los colores que nos interesen.
Las islas de flores o camas isla se pueden crear exentas, en medio del jardín, rodeada de césped u otras plantas, o junto a muros, delimitando el espacio y creando caminos por los que circular. Son una forma diferente de crear laberintos o composiciones originales.
Rocallas
Cuando nos enfrentamos a jardines con cierta inclinación una buena estrategia para trabajar estos espacios es la inclusión de rocallas. Una rocalla es composición natural que combina rocas con plantas, normalmente de origen alpino, resistentes a la sequía.
Las rocallas son una forma atractiva de dar forma a desniveles junto a una escalera, para crear barreras visuales que separen zonas o para colocar bajo los muros de la casa, impidiendo el acceso directo a las ventanas.
Jardines con estanque
Y para terminar os propongo una última idea: introducir el agua en movimiento dentro del jardín. Además de las plantas, los estanques aportan textura y sonoridad a este espacio de naturaleza artificial. Su forma y composición se puede adaptar a todo tipo de terrenos y presupuestos. Junto a ellos se pueden sembrar plantas acuáticas e introducir ranas o pececitos.
Espero que estas ideas os hayan inspirado para crear vuestros propios jardines de ensueño. Un abrazo para todos y todas, sed felices, nos vemos en las redes.
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